Monday, November 5, 2007

Mozart político

Desconozco (me gustaría averiguar) si hay signos de un rebel yell de francmasonería en el Requiem. Mozart (como el santo de la espada Don José de San Martín) era un miembro orgulloso de ese brote underground de totemismo ilustrado. La biografía pop de Milos Forman es monógama, fiel a los hechos en este punto: Wolfie dejó de lado el encargo que le habían hecho para el Requiem (había escrito algunas partes) para empezar y terminar Die Zauberflote, atravesada a rabiar por guiños pro-masons y codazos de alto contenido político anti-imperial.

Con menos input, creo, que el que Mason (Charles) necesitó para deconstruir las instrucciones bestiales codificadas por John, Paul, George y Ringo en I'm the Walrus, Die Zauberflote puede leerse como un mensaje político contra la Emperatriz austríaca contemporánea de Mozart, arrojada a la escena en forma de la Reina de la Noche.

A modo de venganza del compositor, la línea vocal de la Reina suele comenzar abruptamente, sin darle un pie de notas previas como para que el personaje encuentre el tono exacto: el canto es vertiginoso no meramente desde el punto de vista de la coloratura, zarpadísima, sino desde la posición 0 del silencio, cuando la soprano tiene que abrir la boca y arremeter el grito. Ejemplo crucial: en Die Holle Racht kocht in meinen herzen, La Reina pasa de psicopatear a su hija Pamina en alemán plano para aullarle que asesine a Sarastro, el sacerdote de Isis y Osiris (signos egipcios preferidos por los masones), una especie de mago-Soberano ilustrado que harías las delicias contrafácticas de Platón; todo sin que medie más que un par de trémolos de cuerdas.



Crudelísima, despiadada, la Koenige es la reina del vicio y la oscuridad mental. La de Natalie Dessay supra no es mi favorita -muy histérica, petit bourgeoise- pero técnicamente está muy bien. Sarastro es la posibilidad (trunca) del advenimiento de los francmasones a la superficie, impedida por la Emperatriz Marie Therese que recientemente había conducido una caza de brujas de masones, suprimiendo la masonería en Austria.

Herbert von Karajan dice acá (a Sumi Jo!!) que para cantar bien La Reina hay que cantar como una ametralladora. Nosotras (mi voz y yo, hahahha) no cantamos la Reina; pero sí su hija! este dueto de Pamina y Papageno, Bei Mannern welche Liebe fühlen:



Yo tengo una voz más oscura (la de esta chica es bastante ligera, pero está muy bien cantado), y prefiero cantarlo más lento, pensando que somos unas Gundulas (que dibujamos con el aire como hace ella con el aria solitaria de Pamina Ach ich Fulhs.)

2 comments:

girlontape said...

lo maravilloso de tus analisis es que, aún en mi casi total ignorancia de la música clasica, te sigo perfectamente y escucho tus clips con nuevos insights...I could see you teaching this course at Wellesley (my alma mater) or the New School....

Pola said...

were that the case, I think I would spank everysingleone of my students while listening to Der Holle Rache...
and i'd scream:
yo Pamina lil' BITCH!!!

uhhh and mozart meets a S/M hiphop spree...